Autos Autónomos: ¿predominantes en 10 años?
Por Pedro Gerard Langenscheidt
Si las predicciones se validan, ha iniciado un proceso disruptivo que verá una transformación radical para la industria automotriz que provocará más cambios en los próximos diez años, que en los últimos 100.
Centros de estudio y agrupaciones estratégicas pronostican que los automóviles autónomos serán comunes en 10 años, y predominantes en 15. Este proceso provocará un cambio estructural sin precedentes en las economías y amenaza con hacer desaparecer toda una serie de industrias ligadas al automóvil.
Según un estudio de Morgan Stanley, los americanos utilizan el auto sólo el 4% del año y destinan más de 9,000 dólares en costos asociados a su propiedad. Es el segundo gasto más importante, después del destinado a vivienda. Resultados de encuestas arrojan que una abrumadora mayoría de adultos estaría dispuesta a usar autos autónomos y más de una tercera parte prescindiría de adquirir un auto para uso personal.
Un estudio realizado por la universidad de Columbia, estima que con sólo 9,000 autos autónomos, un servicio como Uber podría sustituir a todos los taxis de la ciudad de Nueva York, con un periodo de espera promedio para los clientes, menor a un minuto. El bajo costo y practicidad de esta “nube” de transportación, haría la noción de propiedad de un auto, con todos sus inconvenientes, obsoleta.
Podrían desaparecer industrias como la de seguros de autos, de financiamiento, de hojalatería, de distribución, de estacionamientos y de accesorios, por citar solo algunas.
Podríamos ver la obsolescencia de la industria de autos de alquiler y hasta la de transporte público. El cambio también afectaría toda la industria de transportación de mercancías y eliminaría millones de plazas de trabajo de choferes y operadores de tracto camiones, autobuses, taxis y otros.
Morgan Stanley estima que una reducción de 90% en accidentes viales, salvaría en Estados Unidos 30 mil vidas y prevendría más de dos millones de lesiones.
Según el estudio, un 30% del tráfico citadino consiste en vehículos que buscan un lugar de estacionamiento. Los autos autónomos no necesitan estacionarse y se liberarían los carriles destinados a ello. La infraestructura vial existente estaría sobrada.
Menos tránsito, se traduciría en un ahorro anual de casi 40 horas para el conductor americano promedio, el equivalente a una semana laboral. Si bien este desarrollo amenaza con hacer desaparecer industrias centenarias y sus plazas de trabajo correspondientes, los consumidores tendrían el equivalente a un trillón de dólares adicionales en ingreso discrecional, derivado de los ahorros de prescindir de la propiedad de un auto, y contribuirían a una dramática reducción en el impacto ambiental ya que la migración hacia vehículos híbridos y/o eléctricos se intensificaría.
Los grandes conglomerados como General Motors, VW o Toyota, basan su modelo de negocio en cientos de modelos y variantes para satisfacer el gusto del consumidor individual. Algunos cuestionan si estos fabricantes podrán hacer la transición a un mundo con una drástica reducción de volumen y un reducido número de modelos estandarizados.
El futuro de la transportación podría estar en manos de jugadores no tradicionales como Apple, Google o Tesla.
Los más escépticos cuestionan los tiempos de la adopción y generalización de estas nuevas tecnologías, particularmente en países en vías de desarrollo, pero todo indica que el mundo estaría en el umbral de una nueva era de eficiencia e innovación en materia de transporte. El automóvil autónomo promete un cambio de paradigma tan profundo como el internet y los teléfonos celulares inteligentes.
El placer de sentarse al volante de un auto, podría tener los días contados. Suena fantasioso pero, está en proceso de hacerse realidad ¿Está usted preparado?