Pese a todos los esfuerzos no habrá acción que revierta el daño ecológico que dejó la importación de más de un millón 250 mil vehículos ilegales al país durante el año pasado, tras el decreto que permite la legalización de autos chatarra procedentes de Estados Unidos , así lo afirmó Guillermo Rosales Zárate, Presidente Ejecutivo de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores, la AMDA, en conferencia de prensa, acusó que los efectos positivos de la electromovilidad a través de la adquisición de autos en los hogares, se ve rebasado por ese acto ilegal.
“Y me atrevo a adelantar, que en los próximos 10 años el total de vehículos eléctricos que se logren incorporar al parque vehicular en México con sus efectos positivos en cuanto a la disminución de emisiones contaminantes, versus vehículos a gasolina o diésel, no alcanzará para revertir el efecto nocivo en el incremento de la emisión de contaminantes a la atmósfera que ya se provocaron en 2022, con la decisión de permitir y seguir permitiendo este año, la introducción del contrabando automotriz, chatarrizando aún más el parque vehicular”.
Recordó que con esta acción en beneficio de los supuestamente más necesitados, resulta contraria, ya que las ganancias están yendo a los grupos del crimen organizado que se dedican a introducir estos vehículos, en asociación con grupos ligados a intereses políticos, sin embargo, recordó que el daño, será para los mexicanos de las presentes y futuras generaciones con un medio ambiente afectado, que se suma a la pérdida de empleos que se pueden generar en una de las industrias que más genera empleo; recordó que mientras la industria comercializó un millón 100 mil unidades y sólo de ellos 5 mil fueron totalmente enchufables, la chatarra sigue inundando las calles del país con vehículos chatarra, inseguros, altamente contaminantes y que son basura en el vecino del norte.