Una mancha en el suelo, justo debajo del coche, puede ser una señal de que existe una fuga de aceite. Algunos propietarios o usuarios de vehículos no le dan importancia y siguen circulando con normalidad, sin embargo, si el coche pierde aceite y no se detecta de dónde proviene la fuga, esta continuará poniendo en peligro al motor y a los ocupantes del automóvil.

De hecho, la principal función del aceite de motor es crear una película entre las piezas para facilitar su movimiento y disminuir la fricción, evitando así un desgaste prematuro. Sin embargo, también se encarga de sellar el espacio entre los pistones para mantener la compresión y eliminar los residuos de carbón que se forman en el motor, y que recibe el nombre de “carbonilla”.
Otra de las funciones más importantes del aceite de motor es mantener el motor en su correcta temperatura de operación. Por consiguiente, si el coche ha perdido mucho aceite, en poco tiempo las piezas alcanzarán una temperatura muy elevada y prácticamente se “fundirán”, lo cual significa que tendrás que cambiar el motor del coche, con el consecuente gasto que ello conlleva. Las piezas que comúnmente se funden son las bielas, y es cuando se dice que el coche se ha “desbielado”.
Por supuesto, no es habitual que el motor se quede sin aceite, pero si notas que el coche pierde aceite, será mejor que acudas inmediatamente a un taller mecánico donde puedan detectar el origen del problema y solucionarlo. Para verificar que el coche tiene una fuga de aceite, te recomendamos:
- Comprobar que se trata realmente de una fuga de aceite, ya que a veces puede ser otro fluido o simplemente agua.
- Algunos conductores se alarman sin razón cuando encuentran un pequeño charco debajo del coche. En muchos casos se trata simplemente de la condensación del agua por el uso del aire acondicionado, algo muy usual en verano.
- Comprueba el nivel de aceite con la varilla. Si el goteo persiste y notas que el nivel de aceite ha bajado, debes acudir al taller.
- Ten en cuenta que si la fuga es grave es mejor llamar a una grúa.
Las causas más comunes de una fuga de aceite
- Tornillo mal apretado: Lo más común y menos grave es que el tornillo de vaciado del cárter esté mal ajustado o que se haya forzado demasiado en el último cambio de aceite. En ese caso bastará con ajustarlo o cambiarlo.
- Holgura en las juntas: la fuga también puede deberse a una holgura en las juntas, ya sea en las juntas de la tapa de balancines o en la junta del tapón de llenado. Este problema suele deberse a la dilatación que sufren los motores con el uso y el paso del tiempo o simplemente a que las juntas han llegado al final de su vida útil. En estos casos el aceite lo mancha todo, por lo que si le echas un vistazo al motor por debajo notarás que está negro y sucio.
- Fisura en el cárter: Si el goteo es persistente puede deberse a una fisura en el cárter, que normalmente se produce cuando el coche sufre un golpe por debajo. En esos casos es recomendable acudir inmediatamente al taller ya que el nivel de aceite baja muy rápido.