El kaki-no-tane, es una mezcla de galletas de arroz y cacahuate, por tradición es uno de los refrigerios preferidos en Japón. Comido por los astronautas japoneses como un alimento espacial certificado y con una historia que abarca 99 años, el snack picante es un tema frecuente de conversación a nivel nacional.
En 2020, por ejemplo, los amantes de los bocadillos japoneses se volvieron locos por una encuesta de Twitter que preguntaba a nivel nacional por la proporción ideal entre galletas saladas y cacahuate, declarando que la mezcla perfecta era 7:3 a la supuesta 6:4.
Ahora, como un fabricante de automóviles orgulloso de su propio lugar único en Japón, Nissan se ha asociado con el fabricante de productos secos, Tatsuya Bussan, para crear una versión especial con forma de Nissan de la botana enormemente popular.
Con una amplia gama de modelos antiguos y actuales de la línea Nissan, como el Skyline GT-R, los clásicos Datsun y modelos pioneros como el LEAF, el snack recientemente reenvasado está llevando la diversión a los hogares de todo Japón.
Contribución de Nissan a la comunidad local
El área más amplia de Isehara en la Prefectura de Kanagawa alberga tanto a Tatsuya Bussan como parte del Nissan Technical Center. La zona es famosa por el Santuario Afuri, un lugar de peregrinación religiosa desde la antigüedad. El santuario sintoísta se encuentra a medio camino de la imponente montaña Oyama en las afueras de la ciudad.
“Nuestra idea central”, dijo Gen Sugino, miembro del equipo de diseño detrás del proyecto, “era crear un producto que simbolizara el área local y capturara la esencia de Nissan”.
El equipo de Nissan trabajó con Tatsuya Bussan y el Comité de Promoción del Patrimonio de la Ciudad de Isehara. Juntos, desarrollaron una idea para crear 23 diseños de galletas de arroz con forma de autos Nissan como: Nissan Fairlady Z, Nissan March, Nissan Murano, Nissan GT-R, Nissan Serena, Nissan JUKE, Nissan LEAF, ente otros.
Estos diseños, fueron empaquetados en un recipiente en forma de lata diseñado para caber en los portavasos de los automóviles, también agregaron una galleta más en forma de la montaña Oyama para un sabor local adicional.
“Lo que más me impresionó de este proyecto”, dijo el representante de la División de Turismo de la ciudad de Isehara, Toru Matsuo, “fue que todos en el equipo de Nissan parecían muy motivados para crear algo grandioso. Ese entusiasmo no solo despertó mucho interés en el proyecto. También nos inspiró en el gobierno local para generar nuestras propias ideas innovadoras. Ese intercambio de ideas tuvo un impacto real en nosotros”.
Popularidad entre los amantes de los autos y los fanáticos de los snacks por igual
A la venta desde 2020, las latas de bocadillos kaki-no-tane de Nissan son un producto de moda en la Galería Nissan en Yokohoma y en los minoristas locales, así como también directamente de Tatsuya Bussan.
Inicialmente, solo se produjeron 10,000 latas, pero a partir de febrero de este año, las ventas han superado la marca de las 380,000 unidades.
“Por supuesto, prácticamente todos en Japón han probado el kaki-no-tane”, dijo Noriyuki Takahashi de Tatsuya Bussan. “¿Pero han probado el kaki-no-tane con forma de auto? Este snack te invita a imaginar 23 modelos famosos de Nissan recorriendo la base del monte Oyama. ¡Es fácil entender por qué Nissan kaki-no-tane es tan popular!”
Una versión ajustada con precisión de un bocadillo muy querido
La precisión visual de las galletas con forma de vehículos Nissan también es un punto de venta importante. Los diseñadores e ingenieros de Nissan consideraron los detalles finos de cada modelo, desde la forma de sus ruedas hasta la ubicación de los alerones.
El horneado de la masa de arroz también presentó a los equipos de diseño e ingeniería una gran cantidad de elementos de reflexión. Se dieron cuenta de que a medida que la masa sube, las formas de los autos se distorsionarán. Esto los obligó a adaptar sus diseños para adaptarse a tales cambios.
¿El resultado? Una pieza de maquinaria conocida como “troquel” que prensa y corta la masa del kaki-no-tane. Anteriormente, solo un número limitado de artesanos podía producir un troquel adecuado para la forma de un kaki-no-tane.
Conexión con la cultura y el patrimonio japonés
Cuenta la leyenda urbana que al creador del kaki-no-tane se le ocurrió la idea después de pisar accidentalmente y alterar la forma de un molde circular para galletas de arroz en 1923.
Estaba encantado con las galletas saladas en forma de media luna con forma de semilla de caqui que producía el troquel. Se dio cuenta de que este invento accidental, aunque pequeño en sí mismo, podría tener un gran impacto en el mundo de los bocadillos japoneses. Casi un siglo después, Japón todavía disfruta de los encantos del kaki-no-tane.
“Nos inspiró esta historia”, dijo Sugino, del equipo de diseño de Nissan. “Queríamos crear un entorno con nuestros socios locales donde la artesanía tradicional y la cultura gastronómica pudieran encontrarse con el diseño vanguardista de Nissan. El resultado fue Nissan kaki-no-tane. Realmente puedes saborear la emoción y el sentido de conexión que se desarrollaron al desarrollar este proyecto”.