Antes de viajar con la familia, es importante que tomes estos puntos a consideración:
Revisa la presión antes de cualquier trayecto
Consulta en el manual de fábrica de tu vehículo la presión ideal que debes mantener en tus llantas. Con una presión óptima, el desgaste en su banda de rodadura es menor y esto se traduce en una mayor vida útil del neumático.
Recuerda que esta revisión se realiza en los primeros minutos que ya iniciaste tu recorrido.
El nitrógeno va con todo
Ya sea ante calor, frío, lluvia o vientos, el inflar las llantas con nitrógeno siempre será una buena inversión. Ya que mantienes el interior del neumático a una temperatura estable sin importar el clima exterior o del asfalto, guardas la presión ideal del mismo por más tiempo y evitas la oxidación de tus rines.
Equipo de emergencia siempre listo
Revisa tu equipo de emergencia ante cualquier eventualidad. Cerciórate de que tu llanta de refacción esté en buen estado y tenga la presión correcta, un gato funcional y tu llave para el cambio (ya sea en forma de cruz o en “L”)
Líquidos del vehículo.
Es muy importante revisar los niveles de tu auto como aceite, anticongelante y limpiaparabrisas, pero sobre todo el de los frenos para que el auto siempre responda a situaciones de frenado inesperados. En este sentido, Goodyear te invita a acudir a un Centro de Distribución autorizado para que un experto revise el estado de los discos de freno o balatas y así evitar cualquier eventualidad.
Revisa el dibujo de la banda de rodadura
El grosor mínimo sugerido es de 1.6mm (lo que mide el borde de color plata de una moneda de un peso mexicano). Si ves que ya no cumple ese límite, no lo pienses más… ¡es momento de cambiarlo!