El fuerte crecimiento continuo en las ventas de vehículos eléctricos ha hecho que los analistas de todo el mundo sean optimistas sobre su futuro. La industria ha mejorado mucho durante los últimos 10 años, y esto se refleja en la calidad y el rendimiento de los automóviles. Sin embargo, todavía hay grandes limitaciones con respecto al precio, que no ha bajado como debería.
El crecimiento de las ventas de vehículos eléctricos supera a los SUVs
Hace diez años, los SUV ocuparon un lugar central en términos de popularidad y rentabilidad. Sin embargo, los vehículos eléctricos ahora han tomado la delantera en términos de crecimiento de las ventas. Nuestros datos muestran que su volumen aumentó casi cinco veces entre 2011 y 2018, pasando de 1.13 millones de unidades a 5.11 millones de unidades. A pesar de las condiciones negativas del mercado en los EE.UU., China y Europa, nuestros datos muestran que se vendieron 4.89 millones de vehículos eléctricos entre enero y octubre de este año, un aumento del 20% en el mismo período del año pasado.
Sin embargo, hay otro lado de la historia. En comparación con las ventas totales (ICE, EV, LCV y vehículos pasajeros), los EV siguen siendo un segmento de nicho. Su participación de mercado totalizó 7.2% hasta octubre de este año, aunque es una mejora marcada en la participación de 1.7% registrada en 2011, no es nada en comparación con la participación de 89% registrada por los vehículos con motor de combustión interna (ICE). Esto muestra que la mayoría de los conductores en todo el mundo todavía están comprometidos con los vehículos de gasolina.
A diferencia de los ambiciosos planes anunciados por los fabricantes de automóviles para los próximos años, la realidad actual es muy diferente y, en algunos casos, preocupante. Para 18 de los mayores fabricantes, los vehículos eléctricos representan menos del 10% de las ventas globales. Por otro lado, los fabricantes de automóviles con los mejores resultados representan el 5% de las ventas globales.
Los consumidores quieren SUV electrificados
Otra gran disparidad en el mundo EV es el pequeño papel que juegan los SUV. La popularidad de los SUV no ha mostrado signos de desaceleración y, a raíz de la creciente preocupación por el medio ambiente, los consumidores ahora quieren SUV electrificados. Sin embargo, hay una brecha en el mercado, con una oferta limitada. Esto plantea problemas serios, especialmente cuando se considera que el poco crecimiento que queda en la industria está siendo impulsado por los SUV. En otras palabras, la mayoría de los fabricantes de automóviles no están haciendo uso del auge de los SUV para expandir su presencia en el mundo EV.
La mayoría de los esfuerzos hasta ahora para los vehículos eléctricos se han centrado en automóviles tradicionales: sedanes en los EE.UU. y automóviles pequeños en China y Europa. De hecho, la oferta de SUV es muy limitada con solo 100 modelos / versiones disponibles en este momento en forma EV, frente a más de 400 en forma de gasolina o diésel. Esto se debe en gran medida a la gran brecha entre la oferta de ICE y EV entre todos los segmentos. También hay una diferencia al comparar el precio, ya que la mayoría de las ofertas en el mercado de ICE se concentran en el rango de 11,092 USD – 44,368 USD (en el caso de Francia), mientras que la mayoría de los vehículos electrificados tienen un precio de entre 33,277 USD y 66,554 USD.
El precio de los autos eléctricos no está bajando
Quizás el hallazgo más preocupante en el cambio hacia la electrificación es que los precios no están disminuyendo como se esperaba. Nuestros datos indican que China es el único mercado donde los autos eléctricos puros se volvieron más accesibles. durante los últimos años. En contraste, la situación en los Estados Unidos y Europa parece menos esperanzadora. Si los fabricantes de automóviles y los gobiernos no abordan este problema, los vehículos eléctricos continuarán desempeñando un papel secundario para los vehículos ICE.
Para poner esta disparidad de precios en contexto, en China un Vehículo Eléctrico de Batería (BEV) que costó el equivalente de $ 1 USD en 2011 ahora costaría $ 0.52 USD. Esta mejora se debe principalmente a los incentivos otorgados por el gobierno central y al lanzamiento de autos urbanos eléctricos y modelos más económicos. Además de esto, los fabricantes en China no tienen que cumplir con las difíciles regulaciones de seguridad impuestas a sus contrapartes en Europa y los Estados Unidos.
Sin embargo, la situación en Europa y los Estados Unidos es todo lo contrario.El mismo automóvil con un precio de $ 1 USD. en 2011 ahora costaría $ 1.42 USD en Europa y $ 1.55 USD en los Estados Unidos. Si bien los precios de BEV se han reducido a la mitad en China durante los últimos ocho años, han aumentado en un 42% -55% en Occidente. El enfoque de los fabricantes occidentales ha sido en automóviles premium y más caros. Esto deja muy pocas ofertas en los segmentos de nivel de entrada.
Un BEV puede ser más barato que un automóvil ICE, pero solo en Noruega
Como los precios de los BEV no están cayendo, la brecha entre ellos y los autos ICE permanece. Esto es particularmente cierto en los EE.UU., donde la presencia de sedanes y SUV premium de Tesla tiene un enorme efecto en la diferencia de precio. Si bien el precio minorista promedio de los automóviles de gasolina / diésel vendidos hasta septiembre fue de $ 35,970 USD, sus contrapartes eléctricas costaron $ 51,691 USD, o 44% más. Sin embargo, en Europa es probable que los precios se reduzcan debido a la llegada de autos más pequeños como el Opel Corsa-e, Peugeot 208-e y el próximo Mini eléctrico y Fiat 500 BEV.
